ven, destrucción.
tomame de la mano y haz de mi lo que te encanta.
en mis jardines puedes regodearte,
descabezando los rosales
y haciendo añicos las fuentes de cristal.
ya mi palacio no es una construcción muy alta,
no será difícil echar abajo las torres
y alimentarte de los blasones
que ya de poco hablan.
toma esa silla aterciopelada
y azótala contra el busto de mi conciencia
y hazlo estallar en mi cerebro enfermo.
ven, lluvia y agota tus fuentes sobre mi cabeza.
llevate todo este escombro febril,
y de esta flaqueza, dame fuerza para seguir viviendo
pensar y que de ese pensamiento
florezca un nuevo palacio y un nuevo jardin.
no escondido tras el desfiladero perenne,
ni emparedado tras el muro de musgo,
sino simplemente apostado en la calle de alguna ciudad
con el sol en la cara
y la humedad escondida lejos.
posted by Sathiel @ 7:25 AM
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